La manifestación ha contado con la presencia del concejal socialista del Ayuntamiento de Madrid Antonio Miguel Carmona, que ha acusado a los Gobiernos regional y nacional de querer "deteriorar la Sanidad Pública para luego venderla o revenderla a la Sanidad Privada". De acuerdo con Carmona, en lo que va de legislatura hay "25.000 trabajadores sanitarios menos y un recorte total de 40.000 millones de euros", lo cual "demuestra" la "estrategia para privatizar" de los Gobiernos del PP.
Por su parte, los asistentes a la manifestación han exigido la "recuperación" de los servicios "privatizados" que "según datos ya están demostrando ser poco saludables para una Sanidad Pública de garantía y de calidad", ha declarado la portavoz de la Mesa de la Defensa de la Sanidad Pública en Madrid (MEDSAP) Carmen Esbrí.
La Asociación de Trabajadores del Centro de Transfusión se ha sumado el evento para reivindicar una "marcha atrás en el convenio firmado entre Cruz Roja y la Consejería de Sanidad", según ha explicado la portavoz de la asociación Delei Edreira. La asociación incide en que Cruz Roja recibe 67 euros de la Comunidad de Madrid por cada bolsa de sangre que recoge.
Además, la Marea Blanca también ha pedido la "desprivatización" de los Laboratorios Públicos, así como de la Lavandería Central Hospitalaria, que desde 2013 gestiona la empresa privada Flisa, acusándola de dar una mala calidad de servicio ya que "la ropa que llega a los hospitales no es utilizable".
Finalmente, la Marea Blanca exige al Gobierno regional la supresión de la normativa de 2012, aprobada durante el gobierno de Esperanza Aguirre, que "supuso la desaparición de las 26 categorías de trabajadores no sanitarios que participaban en que la Sanidad Pública fuera de calidad", apunta el manifiesto leído al final de la marcha.
La manifestación, convocada por la Mesa en Defensa de la Sanidad Pública de Madrid (MEDSAP) ha tenido lugar en Madrid y ha partido desde el Colegio de Médicos de Madrid para finalizar en el Ministerio de Sanidad.