El pasado 4 de julio un norteamericano quiso celebrar el Dia de la Independecia de una forma muy peculiar. Con 55 años, Christopher Wade, se emborrachó y decidió pasar una 'velada especial' con una mujer. El problema fue que con quien acabó en la cama, no sólo no era mujer, es que ni siquiera era humano.
Según recoge el medio local The Tennessean, Wade robó un maniquí de una conocida tienda de lencería del centro de Nashville justo después de medianoche. En su huída, antes de empaquetarlo al techo de su Toyota Tacoma blanco, dejó al maniquí manco al golpearlo con la puerta giratorio del establecimiento.
Los empleados denunciaron los hechos a la Policía, suministrándoles la matrícula del vehículo, un dato esencial que agilizó enormemente la captura del prófugo adorador de figuras. Y es que a las pocas horas, agentes de las fuerzas de seguridad se presentaban en su domicilio y le sorprendian en la cama en actitud amorosa con su 'nueva amante'.
La etílica escapada romántica le puede salir muy caro a Wade. Y es que la empresa de ropa interior ha tasado sólo el miniquí, sin la ropa que portaba, en 5.000 dólares. Una cantidad por la que ha sido acusado de un delito de robo, estando en prisión, bajo una fianza de 11.000 dólares, hasta el pasado miércoles.
Mientras tanto, y a la espera de juicio, el manco maniquí se encuentra en el departamento de pruebas de la Policía de Nashville, a la espera de ser entregado a los empleados de la tienda para ser ensamblado de nuevo. Una recuperación que será rápida, ya que sus miembros se unen a través de diversos imanes.