Los habitantes de los poblados de la prefectura del noreste de Atenas han pasado una tercera noche de pesadilla con las llamas de un extenso incendio que ha arrasado en las últimas horas cientos de hectáreas de bosques y calcinado decena de viviendas.
El fuego, que ha ardido sin cesar desde el viernes, se ha acercado a unos pocos kilómetros de Atenas, rodeando el monte de Pendelis, uno de los pocos pulmones de la región capitalina. Miles de personas han tenido que ser evacuadas.
Sonido de campanas
Las campanas de las iglesias de los poblados de la región afectada han sonado continuamente durante las últimas noches, poniendo en alerta a los pocos habitantes que han permanecido en el lugar para combatir las llamas y proteger sus bienes.
La prefectura de Atenas se encuentra en estado de emergencia y las autoridades han concentrado sus fuerzas para apagar el incendio, que avanza sin control, según un primer cálculo de los bomberos.
Piden más ayuda
Los jefes de las comunidades afectadas protestaban ante los canales de televisión sobre la falta de ayuda por parte de los bomberos por tierra.
El Gobierno griego ya ha pedido la ayuda internacional.
En 2007, unas 250.000 hectáreas fueron calcinadas en Grecia, tras los devastadores incendios que en agosto afectaron el sudeste de Grecia y a la isla de Eubea. Las llamas quemaron en sólo diez días 180.000 hectáreas y causaron la muerte de 65 personas.