La izquierda abertzale expresó "su pesar" por la muerte del policía francés asesinado por miembros de ETA y lamentó su muerte. Asimismo, indicó que la banda armada debería de ratificarse en su posición "favorable" al desarrollo de un proceso democrático "expresada en su comunicado publicado en enero".
Asimismo, en un comunicado, aseguró que, aunque fuera un encuentro "fortuito" entre la policía y los miembros de ETA y no una acción premeditada, eso no resta "gravedad" a lo acontecido. No obstante, en ningún momento se condena el atentado al gendarme francés.
Además, indicó que esta muerte se sucede a la aparición del cuerpo del miembro de ETA Jon Anza "en medio de manifiestas sospechas que inducen a situarlo en un caso de guerra sucia".
Cambios en el 'modus operandi'
El asesinato del gendarme francés cerca de París revela, según los expertos de la lucha antiterrorista, un insólito cambio en el 'modus operandi' de ETA que ha decidido dar un giro radical en sus métodos criminales hacia tácticas más propias de la delincuencia organizada o las mafias.
Con el asesinato del policía francés, ETA ha traspasado además una de sus últimas líneas rojas, después de décadas en las que ha evitado a toda costa causar víctimas mortales entre los agentes de las Fuerzas de Seguridad francesas.