El anciano George Travis, residente en Luisiana, Estados Unidos, desayuna todos los días junto a una fotografía de su mujer fallecida, Billy Mae. Travis lleva yendo al mismo restaurante en Shreveport, Luisiana, desde que su esposa falleciera hace un año. Los asistentes al restaurante y los camareros contemplan con estupefacción siempre la escena y se acercan a darle las condolencias, e incluso algunos clientes se ofrecen a pagarle el desayuno cuando lo ven.
"Agredezco los días que he vivido junto a ella. Si hubiera podido vivir algo más de tiempo habríamos cumplido 50 años juntos", asegura George Travis. La pareja se conoció en una cita a ciegas en la convención del 'Lion's Club' y que fue orquestada por un amigo de ambos. El anciano de 88 años asegura que nunca se han separado y que echa de menos "todo" de su mujer, según recoge el Huffington Post.
"Echo de menos poder rodearla con mis brazos. Ella era un amor y me expresaba todo el amor que sentía hacia mi. Me hacía saber que era mi chica", comenta George Travis, que el pasado 13 de noviembre sufrió un infarto, aunque ya se recupera y pronto podrá volver a su restaurante de siempre para desayunar junto a la foto de su esposa.