Su madre lo dejó el viernes por la noche. Tras cenar en casa de unos amigos de la familia, Claudio Ayuso se marchó para salir con amigos.
Lo encontraron muerto el domingo. La autopsia ha revelado que lo violaron y lo mataron a golpes entre la madrugada del sábado y el domingo. La causa de la muerte fue una hemorragia intracraneal, producida por un traumatismo grave y fractura de cara y cráneo, según los médicos.
Dos jóvenes, de 18 y 21 años, han sido detenidos. Fueron interrogados por la policía porque habían sido los últimos en ver a la víctima pero cayeron en contradicciones. “Uno decía que lo había visto irse por un lado, el otro en una dirección diferente y entonces se fue hasta el lugar y se comenzó un rastrillaje”, asegura una fuente de la investigación en declaraciones al diario Clarín.
A Claudio lo enterraron en una fosa de un metro por un metro de 50 centímetros de profundidad en una nave abandonada. El cuerpo lo hallaron desnudo y mojado y, a simple vista, presentaba golpes en la cara y el tórax.
Los jóvenes están acusados de “abuso sexual con acceso carnal agravado” y “homicidio criminis causa”.