"Todos estamos muy afectados por su trágica muerte", ha comentado Widodo en un tuit que ha sido publicado más de un mes después de que se produjera el ataque a la adolescente de catorce años en la isla de Sumatra.
Los activistas, por su parte, consideran que el Gobierno de Indonesia, donde la violencia sexual es común pero no la violación en grupo, no está haciendo todo lo necesario por proteger a mujeres y niños.
"Este caso revela la poca atención que siguen recibiendo los delitos sexuales. El Estado debe actuar de manera inmediata para devolver la sensación de seguridad a las mujeres", ha manifestado en un comunicado la Comisión Nacional sobre la Violencia contra las Mujeres.
El ataque, que sucede a la brutal violación en grupo que sufrió una universitaria en Nueva Delhi en 2012, ha impresionado a muchos indonesios, que se han manifestado a través de las redes sociales con el objetivo de exigir medidas contra la violencia sexual.
La Policía de Bengkulu ha informado de que siete menores se encuentran a la espera de ser juzgados, cinco adultos están siendo investigados y dos están en busca y captura.