Un tribunal de apelaciones consumó el miércoles el rechazo a la extradición de los militares, que escaparon a Grecia a bordo de un helicóptero la noche en que se produjo el intento de golpe de Estado. Turquía les acusa de colaborar con esta revuelta.
"La Justicia griega, que esperábamos fuese justa e imparcial, nos ha decepcionado una vez más y ha rechazado por segunda vez nuestra petición para la extradición de los ocho golpistas", ha lamentado el Ministerio de Exteriores turco en un comunicado.
Para Ankara, "esta decisión deja a los responsables sin castigo y proporciona refugio a los golpistas". "Está claro que (...) se ha adoptado por motivos políticos", ha añadido el Ministerio, que ha repetido la consigna esgrimida durante los últimos meses.
El Gobierno turco ha vinculado la sentencia con la "obstrucción" de Grecia en la persecución de organizaciones terroristas como el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y ha lamentado que "repita los errores".
"No vemos el apoyo y la cooperación que necesitamos de un aliado en la lucha contra el terrorismo y el delito", ha añadido el Ministerio de Exteriores, que ha advertido de posibles medidas. Esta decisión, ha apuntado, "afectará inevitablemente a las relaciones bilaterales y a la cooperación en asuntos regionales".