Todo apunta que el dinero que tenían los dos terroristas no procede del extranjero, sino que utilizaron sus propios recursos. En concreto, habrían conseguido 28.500 dólares de la empresa Lender, una entidad financiera con sede en San Francisco que concedió un crédito a Farook.
Los terroristas, Farook y Tashfeen Malik --su esposa--, pidieron los créditos al parecer a sabiendas de que no los devolverían porque se embarcaban en una misión suicida.
Farook era estadounidense, hijo de inmigrantes paquistaníes, y Malik era paquistaní, aunque pasó gran parte de su vida en Arabia Saudí. El FBI investiga el atentado como un "atentado terrorista" porque al parecer Malik prestó juramento de fidelidad al líder del autodenominado Estado Islámico en un vídeo colgado en Facebook.