El Comité Nacional Antiterrorista ha detallado que "unidades del Servicio Federal de Seguridad y del Ministerio del Interior de Rusia desmantelaron una célula criminal clandestina vinculada a la organización terrorista internacional Estado Islámico".
En su comunicado, recogido por la agencia rusa de noticias Sputnik, ha agregado que los miembros de la célula "tenían la intención de cometer delitos contra cargos públicos y agentes de seguridad".
Asimismo, ha afirmado que la operación fue llevada a cabo en la localidad de Derbent, escenario en febrero de un atentado suicida con coche bomba cuya autoría reclamó Wilaya de Kavkaz (Provincia del Cáucaso), filial de Estado Islámico en la región.
En el ataque murieron dos policías y resultaron heridas otras doce personas, entre ellas seis agentes, según el balance oficial.