No aceptan el pacto de Ginebra. Los líderes separatistas prorrusos de Donetsk no tienen la intención de desarmarse como les pide el acuerdo al que han llegado EEUU la UE y Rusia. Las calles de esta ciudad industrial del este del país continúan llena de barricadas. Alegan que debe ser Kiev quien desarme primero al movimiento nacionalista paramilitar Pravy Sektor y a la Guardia Nacional y posteriormente, serán ellos quienes, eventualmente, entregarán las armas.