El presidente Alí Bongo parte como favorito en las disputadas elecciones de mañana en Gabón

EUROPA PRESS 26/08/2016 15:15

Bongo Ondimba ha completado un mandato de siete años tras llegar al poder, tras la muerte de su padre y predecesor, Omar Bongo, en 2009. Ahora, se enfrenta al veterano diplomático Jean Ping, parte de un colectivo de nueve aspirantes que han denunciado al unísono que el actual mandatario nació en Nigeria y fue adoptado, acusaciones que el propio candidato desmiente y que el Tribunal Constitucional ha tachado de inadmisibles, ratificando la nacionalidad gabonesa del presidente.

Según los datos de la cadena británica BBC, Gabón tiene una de las rentas per capita más altas de África, una ventaja de la que disfruta solo una porción de sus 1,6 millones de habitantes. La presión económica se ha acentuado durante los últimos meses sobre los estratos más pobres debido al acusado descenso de los precios del crudo. En los últimos meses, los funcionarios han declarado varias huelgas en protesta por el impago de sus salarios.

La oposición, además, denuncia que el sistema político está intoxicado por la masiva influencia del gobernante Partido Democrático que lidera Bongo Ondimba. Ping, presidente del gran partido nacional opositor, el Frente por un Cambio Político, quiere efectuar una amplia reforma política si resulta ganador, un impulso que el propio presidente gabonés quiere contrarrestar al comprometerse a volver a instaurar el límite de mandatos que abolió su padre en 2003. Más allá de eso, no se esperan cambios fundamentales.

Por lo demás, el dirigente ha mostrado durante la campaña su faceta más relajada, a pesar de algunos escándalos financieros y por supuesto fraude en relación a los activos familiares, y que espera resolver cumpliendo su promesa de entregar a caridad cualquier dinero que acabe heredando de su padre, una vez terminen los largos trámites -- hay que tener en cuenta que Omar Bongo gobernó durante 41 años y sus activos están dispersos.

Con todo, Bongo se muestra confiado en la victoria, merced al dominio de su partido sobre el actual sistema de información, y al hecho de que solo le hace falta un voto más que su contrincante para ganar, lo que elimina cualquier posibilidad de empate técnico.