Según declaraciones recogidas por 'The New York Times', Putney ha indicado que sí tiene previsto mostrar las grabaciones a la familia de Scott, a petición de esta, pero que no se harán públicas.
No obstante, ha reconocido que en las imágenes no se ofrecen "pruebas visuales definitivas y absolutas" de que Scott lleve un arma, si bien ha indicado que los testimonios y las pruebas que rodean el suceso sugieren que así fue.
"Si se tiene en cuenta la totalidad del resto de pruebas, apoyan la versión que hemos dado sobre las circunstancias de lo que ocurrió y que conllevó a la muerte del señor Scott", ha indicado Putney en rueda de prensa.
El jefe de la Policía se refiere, con estos términos, a la versión de que Scott se bajó del coche y cuando los agentes se acercaron a él, éste portaba un arma, por lo que uno de los agentes disparó contra él. No obstante, miembros de la familia del fallecido indican que llevaba en la mano un libro.
Putney ha indicado que forma parte de la práctica de su departamento no publicar los vídeos de este tipo de actuaciones para proteger la integridad de las investigaciones.
Tras la muerte de Scott, decenas de personas salieron a manifestarse para denunciar la actuación policial y se registraron enfrentamientos con los agentes de la Policía desplegados en el lugar en el que fue abatido a tiros.
Este miércoles por la mañana, los manifestantes han bloqueado la autovía Interestatal 85, donde han robado cajas de caminos y han provocado varios incendios antes de que la Policía empleara granadas de humo para intentar dispersarles, según ha informado la filial de la cadena ABC en Charlotte.