Los norcoreanos, obligados a hacer trabajos forzados para mostrar su lealtad

Noticias Cuatro/Agencias 07/05/2016 10:26

El congreso ha comenzado este viernes en Pyongyang con el claro objetivo de consolidar el liderazgo de Kim Jong Un y exponer sus planes de futuro. Para preparar los fastos del congreso, se ordenó en febrero a ciudadanos de todo el país realizar trabajos forzados para construir nuevas estructuras y asear las ya existentes en La Batalla de los 70 Días.

También se aceleró la producción industrial y agraria para cubrir los gastos de este congreso, informa la ONG estadounidense Human Rights Watch (HRW). "La institución central de la Séptima Convención del Partido de los Trabajadores ha hecho trabajar a los ciudadanos animándoles a mantener un alto grado de compromiso y entusiasmo político para lograr unos mejores resultados", ha señalado una fuente de la RFA desde la provincia de Hamgyong del Norte.

A pesar de los trabajos, algunas estructuras de esta provincia aún no están acabadas. "Los ciudadanos están agotados por la cantidad de trabajo en proyectos de construcción estatales y por la movilización forzada y la financiación forzada para los mismos. A los ciudadanos no les importan los proyectos en sí", ha añadido la fuente.

Además, los recursos invertidos en estas obras han dejado sin materias primas al 90 por ciento de las fábricas de la región, lo que ha forzado su paralización durante estos 70 días, ha apuntado otra fuente de Hamgyong del Norte. "Hay incontables fábricas que han parado sus operaciones debido a la falta de materiales, no solo en la provincia de Hamgyong del Norte, sino en todo el país", ha indicado.

Ante esta situación, HRW ha pedido a los dirigentes del Partido de los Trabajadores que aborden la situación de los abusos perpetrados por el Gobierno tales como los trabajos forzosos para el propio congreso.

"Este congreso del partido gobernante es un acontecimiento poco frecuente, pero ha sido posible gracias a los trabajos forzados de miles de norcoreanos sometidos a diario bajo el gobierno opresivo de Kim Jong Un", ha apuntado el subdirector para Asia de HRW, Phil Robertson.

"Kim Jong Un habla mucho de mejorar las vidas de los norcoreanos, pero solo sabremos que habla en serio si adopta medidas para atajar los abusos contra los Derechos Humanos", ha argumentado Robertson. "Pero espero sentado a que eso ocurra", ha apostillado.

Hasta ahora poco ha trascendido del contenido del propio congreso salvo que Kim ha elogiado el éxito que supone el ensayo nuclear del pasado mes de enero, así como el lanzamiento de un satélite al espacio en febrero.