Un padre chino, conocido por las duras pruebas físicas a las que somete a su hijo de cuatro años, ha vuelto ha protagonizar las noticias.
El hombre escaló el Monte Fuji con su pequeño para reivindicar la soberanía de las islas Diaoyu, que disputa su país a Japón. Ambos tuvieron que recibir atención médica debido a su estado de salud.
He Liesheng ya fue noticia de periódicos e informativos después de que hace varios meses saliera publicado un vídeo en el que aparece su hijo Duoduo en calzoncillos bajo la nieve siguiendo el método educativo paterno para fortalecer la voluntad del niño.
Esta vez el padre ha ido más lejos y escaló hasta la cima del monte japonés a una altura de 3.776 metros, donde desplegó una pancarta en la que se leía que las islas pertenecían a China. Además hizo una foto para que constara su hazaña patriótica, según publicó el portal 'Shangaisit'.
La excursión, sin embargo, pudo tener graves consecuencias, porque ambos, padre e hijo tuvieron que recibir atención médica por el estado físico en que se encontraban.
Las islas Dioayu/Senkaku están en el centro de un conflicto político entre China y Japón que se disputan su propiedad desde hace varias décadas.
Las tensiones han alcanzado su grado máximo en las últimas semanas después de que el gobierno japonés aprobara la adquisición de tres de ellas a un multimillonario nipón.