La OTAN acusa a Rusia de excederse "significativamente" con sus maniobras Zapad

EUROPA PRESS 26/10/2017 16:44

Los países de la OTAN han afeado a Rusia que sus recientes maniobras militares 'Zapad 2017' en Rusia y Bielorrusia hayan excedido "significativamente" el número de militares desplegados, el alcance geográfico y el escenario avanzado por Moscú, durante la reunión del Consejo OTAN-Rusia celebrada este jueves.

"Los aliados han subrayado el hecho de que el número de militares que participaron en el ejercicio excedió significativamente lo anunciado antes del ejercicio, que el escenario fue diferente y que también el alcance geográfico fue mucho mayor que el anunciado previamente", ha explicado el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en rueda de prensa al término de la reunión de los embajadores aliados con su homólogo ruso, que se ha prolongado durante tres horas y media.

Stoltenberg ha insistido en que "hay discrepancias" entre las informaciones que Rusia dio a los aliados antes de las maniobras y "el número real, escala y alcance del ejercicio", que se excedieron "significativamente" frente a lo anunciado por Moscú y ha recordado que Moscú ha utilizado ejercicios en el pasado "como pretexto para acciones agresivas" en Georgia y Ucrania.

"Todavía estamos evaluando el ejercicio, pero hasta ahora no hemos visto ninguna prueba de que militares rusos se hayan quedado" en Bielorrusia tras el ejercicio, ha explicado.

"Pedimos a Rusia que respete plenamente el documento de Viena y se implique en un diálogo constructivo par a modernizar y mejorar el documento de Viena", ha explicado el noruego, en alusión al documento internacional que regula la notificación y observación de ejercicios militares y recordando que la OTAN ha planteado mejoras como el despliegue de observadores internacionales "sin previo aviso" y "reducir los límites" para la observación obligatoria.

Moscú asegura que sólo participaron 12.700 efectivos en Zapad, junto por debajo del límite de los 13.000 que marca el documento de Viena para la observación internacional, aunque el comandante de las fuerzas de Estados Unidos en Europa, teniente general Ben Hodges, ha cifrado en "más de 40.000" el número de efectivos desplegados.

"Nuestro diálogo no es fácil pero por eso precisamente nuestro diálogo es tan importante", ha admitido Stoltenberg, que ha insistido en que "la transparencia y la reducción del riesgo" en relación a las actividades militares respectivas es una cuestión "vital" para evitar situaciones "peligrosas" y "accidentes", especialmente en un contexto de "más tensión" y actividades militares cerca de sus respectivas fronteras.

Stoltenberg ha reconocido que "varios aliados" han "informado" sobre las capacidades de guerra electrónica que Rusia podría haber probado en sus ejercicios y que se cree que afectaron a las comunicaciones de Letonia. "Este tipo de actividades puede tener efectos serios", ha avisado el noruego, que ha insistido en que Rusia debe garantizar que sus ejercicios "no aumentan o crean situaciones más peligrosas o aumentan las tensiones".

"Si los países de la OTAN están interesados realmente en reducir la escalada, reforzar la seguridad y crear condiciones normales para la confianza mutua tienen que dar pasos para restablecer las relaciones y la cooperación normales. Esto estaría en el interés de todos los países en la región euroatlántica", ha replicado embajador ruso ante la OTAN, Alexandr Grushkó, que ha negado que la guerra electrónica se haya "planteado" en la reunión.

"Hemos propuesto restablecer los mecanismo de consulta y de diálogo normales entre los militares", ha explicado Grushkó, que ha insistido en que sólo participaron 12.700 efectivos militares en Zapad y ha acusado a los aliados de "demonizar" el ejercicio asegurando que "tienen que ver con un ataque a los bálticos" o que Rusia "planea quedarse en Bielorrusia para siempre". Y ha recordado que los aliados han organizado 18 ejercicios "significativo" entre julio y noviembre en el flanco este y han reforzado su presencia naval y aérea en el Báltico.

"No hay militares de Rusia en Bielorrusia, pero vemos más militares de EEUU en Polonia, dos, tres o cuatro veces más", ha denunciado el diplomático ruso, que ha vuelto a instar a la OTAN a dar marcha atrás en su refuerzo militar en el flanco este.

"Hoy pasos para construir la confianza no se pueden hacer a través de cambios en el documento de Viena. Si el objetivo de la OTAN es disuadir a Rusia no hay ninguna medida de confianza posible que pueda ayudar", ha avisado, dejando claro que la seguridad "no se puede construir sobre la lógica de la Guerra Fría", aunque Stoltenberg ha vuelto a dejar claro que los aliados no buscan "una Guerra Fría" ni "una carrera armamentística" y que su despliegue en el este es "proporcional" y "defensivo".

Grushkó también ha acusado a la OTAN de violar el Tratado de No Proliferación Nuclear y el Acto Fundacional del Consejo OTAN-Rusia. "Vemos un aumento en el número de países que participan en ejercicios con componente nuclear. Esto contradice el artículo 1 y 2 del Tratado de No Proliferación y los compromisos que los países de la OTAN asumieron en el Acta Fundacional, que no presuponen ningún cambio en su política nuclear", ha lanzado.

PROFUNDAS DIFERENCIAS SOBRE UCRANIA

Los aliados y Rusia "siguen teniendo diferencias fundamentales" sobre cómo resolver la crisis ucraniana, ha explicado Stoltenberg. "Este conflicto sigue teniendo un profundo impacto en la seguridad y estabilidad de la región euroatlántica y sigue siendo la razón del estado actual de las relaciones entre la OTAN y Rusia", ha incidido.

Los aliados han vuelto a instar a Moscú a "ejercer su influencia" sobre los rebeldes ucranianos y que se cumplan "plenamente" los acuerdos de Minsk tras admitir preocupación por las violaciones del alto el fuego, la falta de retirada del armamento pesado y la falta de acceso en la frontera de los observadores internacionales, mientras que la parte rusa ha insistido en que Kiev incumple los acuerdos.

"La posición de la OTAN no ha cambiado. La cooperación práctica se mantiene suspendida pero mantenemos el canal abierto al diálogo. Rusia no ha cambiado su comportamiento, así que no se dan las condiciones para cambiar de posición", ha explicado una fuente aliada.

Ambas partes también han abordado el conflicto en Afganistán, donde Rusia ha "negado" que esté prestando apoyo a los talibán, ha admitido Stoltenberg, que ha subrayado la importancia de que "todos" apoyen al Gobierno de unidad nacional afgano y sus esfuerzos para avanzar el proceso de reconciliación.