El informe, acordado durante la reunión del CEDAW en Ginebra de la semana pasada, deberá ser remitido en el plazo de seis meses al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, según ha informado el organismo en un comunicado este martes, después de que la petición fuera remitida este lunes al Gobierno birmano. Esta es la cuarta vez que el Comité pide un informe de este tipo desde su creación en 1982.
El CEDAW, integrado por 23 expertos en Derechos Humanos independientes, ha solicitado información respecto a casos de violencia sexual, incluida violación, contra mujeres y niñas rohingya por parte de las fuerzas de seguridad, así como detalles sobre el número de mujeres y niñas que han sido asesinadas o han muerto por causas no naturales durante el último brote de violencia.
Igualmente, quiere que el Gobierno que encabeza Aung San Suu Kyi ofrezca detalles sobre las investigaciones, arrestos, persecuciones, condenas y sentencias o medidas disciplinarias impuestas a los culpables de tales crímenes, incluidos miembros de las Fuerzas Armadas.
El CEDAW también ha pedido información concreta sobre los batallones que participaron en las operaciones en Rajine tras los ataques del 25 de agosto por parte de milicianos rohingya y sobre quién estaba al mando, así como si se ha dado o se dan instrucciones a las fuerzas seguridad de que la tortura y la violencia de género, incluida la violación, además de otros abusos están prohibidos y deben ser juzgados y penados.
El Gobierno birmano debe explicar también si se han adoptado medidas para rehabilitar y compensar a las mujeres y niñas rohingya víctimas de estos actos de violencia, además del número de familias rohingya desplazadas por la violencia y las medidas adoptadas para garantizar su retorno seguro y voluntario, su reinserción económica y su compensación por las pérdidas de tierras o propiedades.