La ONU pide ayuda a Europa para proteger a los refugiados y alerta contra el "doble rasero" en DDHH

EUROPA PRESS 17/05/2017 16:32

"Los Derechos Humanos son un valor en sí y no deben usarse al servicio de otros proyectos políticos. Es importante no ser parcial, es importante no tener dobles raseros ni agendas escondidas", ha defendido el secretario general de la ONU durante una intervención ante el pleno de la Eurocámara en Estrasburgo.

"Lamentablemente, hemos visto que se invocan razones de soberanía nacional muchas veces para justificar la falta de capacidades de la comunidad internacional para responder a las violaciones de Derechos Humanos que vemos en varias partes del mundo", ha avisado, denunciando las "violaciones horribles del Derechos Humanitario Internacional y de Derecho Humanitario Internacional" en los distintos conflictos en el mundo y "la pérdida de terreno en la agenda de Derechos Humanos por la agenda de la soberanía nacional".

El secretario general de la ONU ha avisado de que "nadie gana" y "todo el mundo pierde" en los conflictos", que además alimentan el terrorismo. "Las contradicción de intereses (entre potencias en conflictos) son muchos menores frente a la necesidad absoluta de poner fin a estos sinsentidos y de eliminar esta amenaza para nuestra seguridad global", ha argumentado.

Guterres ha pedido "reforzar las capacidades de la ONU" de prevención y resolución de conflictos y el mantenimiento de la paz, algo que requiere "un apoyo y compromiso muy fuerte de la Unión Europea" y reformar la ONU para que sea "más eficaz y eficiente desde el punto de vista del coste", pero también más transparente y para garantizar la rendición de cuentas. "Una Europa fuerte y unida es una condición absolutamente fundamental para unas Naciones Unidas fuertes y eficaces", ha asegurado.

Respecto a la crisis de refugiados, Guterres ha subrayado la importancia de que la Unión Europea ayude a la ONU a "restablecer el régimen de protección de refugiados de conformidad con el Derecho Internacional" y contribuir de forma "positiva" a la preparación de un acuerdo global sobre "la inmigración segura, ordenada y regular", que ha confiado en que pueda aprobarse en la Asamblea General de la ONU en 2018.

"Si queremos defender los Derechos Humanos necesitamos tener autoridad moral", ha avisado Guterres, que ha recordado que la reciente crisis de refugiados "ha socavado hasta cierto punto la autoridad moral de varios países en todo el mundo para defender los Derechos Humanos de forma eficaz".

Por ello, ha subrayado la importancia de "crear más oportunidades" para la inmigración "legal" y ha defendido que las sociedades occidentales que se están convirtiendo en "multiétnicas" y "multiculturales" significa "diversidad, no una amenaza".

"La UE debe estar en el centro de este debate", ha dicho, al tiempo que ha admitido que hace falta una coordinación internacional "mucho más fuerte" contra los traficantes de inmigrantes, "los peores criminales del mundo en la actualidad".

También ha pedido "invertir en la cooperación internacional". "Es esencial que las políticas de cooperación al desarrollo se construyan de forma que permitan que la gente tenga la elección de quedarse en sus países, de tener oportunidades para vivir con dignidad en sus propios países, que la inmigración sea una elección, no una necesidad", ha explicado.

En rueda de prensa posterior, Guterres ha incidido en que el problema de las desigualdades que ha generado la globalización ha llevado a "muchos" a sentirse "abandonados" por la clase política y ha propiciado "un clima favorable al desarrollo de formas de populismo político, xenofobia, antisemitismo, odio y anti islam, pero también ha creado dificultades a otras minorías como los cristianos en Oriente Próximo" en "todas las partes del mundo". "Hace falta defender los valores fundamentales de la tolerancia, de la primacía de la razón", ha subrayado.

En rueda de prensa posterior con el presidente de la Eurocámara Antonio Tajani, Guterres ha recordado que los países de la UE podrían haber resulto "fácil" el problema en 2015 si se hubieran mostrado "solidaridad" para acoger el millón de refugiados que llegaron a Europa, porque aunque es "mucha gente" solo representa el 2% de la población europea. "Este problema hubiera sido manejable si Europa lo hubiera hecho con solidaridad plena", ha dicho.

Guterres no ha querido "opinar" sobre la posibilidad de que la Comisión Europea sancione a los países que rechazan acoger su cuota de refugiados y ha insistido en que lo importante es respetar el Derecho Internacional y garantizar la protección de los refugiados y ayudar a "los países de primera entrada", como Italia y Grecia.

Aunque lo primero, ha dicho Guterres, "es parar la guerra" en Siria y ayudar a países como Jordania y Líbano para que los refugiados encuentren condiciones "dignas". Así, "habrá mucha menos presión en otras partes del mundo".

Tajani ha avanzado que "una gran mayoría" en la Eurocámara respaldará en una resolución este jueves que la Comisión recurra a los procedimientos de infracción "si los Estados miembros no aumentan" sus plazas para reubicar a refugiados "pronto".

PIDE APLICAR EL ACUERDO DE PARÍS Y UNA GLOBALIZACIÓN "MÁS JUSTA"

En su discurso ante la Eurocámara Guterres ha alertado también de que el desplazamiento "masivo" de personas en el mundo se verá agravado potencialmente por el cambio climático.

"Es absolutamente esencial que el mundo aplique el Acuerdo de París", ha sostenido el dirigente de la ONU, que ha dejado claro que "si un Gobierno cuestiona estos objetivos" compete "al resto garantizar que se mantiene el rumbo" y promover alianzas con la sociedad civil, las empresas y las ciudades y regiones para "cumplir" las ambiciones, insistiendo en que apostar por los negocios verdes "no es solo lo correcto, es lo inteligente". "Contamos con Europa para liderar este esfuerzo a nivel global", ha dicho.

También ha reclamado promover una globalización "más justa" porque la actual ha contribuido a aumentar de forma dramática las desigualdades, recordando que ocho millonarios acumulan la misma riqueza que la mitad de la población mundial, un hecho que ha contribuido a "socavar la confianza de la gente en la clase política" pero también en las instituciones internacionales y en las "soluciones globales".