Las ONG celebran el histórico fallo contra Mladic pero recuerdan que aún hay crímenes por juzgar en Bosnia

EUROPA PRESS 22/11/2017 14:51

"Más de dos décadas después de su acusación, Ratko Mladic finalmente hace frente a las consecuencias por sus horribles crímenes", ha aplaudido Param-Preet Singh, de HRW. "Pone fin a los intentos de Mladic de evadir su responsabilidad por las muertes, las violaciones y las deportaciones de miles de bosnios musulmanes y de bosniocroatas", ha añadido el director de AI para Europa, John Dalhuisen.

Dalhuisen ha destacado que "este trascendental veredicto marca un significativo momento para la Justicia internacional" porque "envía un potente mensaje en todo el mundo de que la impunidad no se tolerará más". Singh ha señalado concretamente a "quienes están en el poder cometiendo atrocidades, ya sea en Siria, en Birmania o en Corea del Norte". "La Justicia llegará a quienes se creen intocables", ha aseverado el trabajador de HRW.

Singh ha apostillado que tanto el fallo contra Mladic como el emitido el año pasado contra el antiguo líder de la República Srpska (la entidad serbia de Bosnia) Radovan Karadzic --que purga 40 años de cárcel--, ambos impulsados por la UE, demuestran que la Justicia internacional llega "si las víctimas usan su músculo político y financiero para apoyarla".

No obstante, ambos han advertido de que el trabajo para juzgar los crímenes cometidos en la guerra Bosnia (1992-1995) no acaban con estos dos casos ni con el TPIY, cuyo mandato expirará el 31 de diciembre tras más de 20 años de ejercicio. "Las autoridades nacionales deben redoblar los esfuerzos para llevar a los cientos de sospechosos ante la Justicia", ha reclamado Singh. "Miles de casos de desaparición forzada siguen sin resolver", ha denunciado Dalhuisen.

Mladic, de 74 años de edad, ha sido condenado a cadena perpetua por diez de los once cargos que pesaban en su contra. El TPIY le ha declarado culpable del genocidio de 8.000 hombres y niños bosniacos (bosnios musulmanes) en la localidad de Srebrenica y de crímenes de guerra y lesa humanidad.

Sin embargo, los tres magistrados del TPIY, con el voto disidente de su presidente, Alphons Orie, han decidido descartar el segundo cargo por genocidio, que se basa en las matanzas llevadas a cabo contra bosniacos y bosniocroatas en seis localidades concretas durante 1992.