La OC cifra en 18.000 los desplazados a causa de la ofensiva contra Estado Islámico en Mosul

EUROPA PRESS 02/11/2016 06:25

En su comunicado, el organismo ha detallado que, si bien los movimientos de desplazamiento "son complejos", la mayoría "se está dirigiendo al sur".

"Alrededor de dos tercios de los desplazados han huido hacia Qayara, con casi 1.400 personas llegando a Faluya, en la provincia de Anbar", ha manifestado.

Así, ha agregado que los campamentos formales "acogen al 52 por ciento de la población desplazada en Nínive, Erbil y Anbar", resaltando que el resto ha buscado cobijo en comunidades de acogida también vulnerables.

"Con el avance de las líneas de frente se descubren nuevas dimensión de necesidad, y la vulnerabilidad de mucha gente, ya sea desplazada o residente, es cada vez más evidente", ha manifestado la OCAH.

En este sentido, ha destacado que en las zonas liberadas entre Mosul y Qayara "la prioridad es la comida", indicando que "el pan y el agua es la base de la dieta y los mercados no funcionan".

En otro orden de cosas, ha señalado que "continúan las quejas por el incendio de pozos petroleros" por parte de Estado Islámico, al tiempo que ha lamentado que las zonas "están muy contaminadas con minas improvisadas y restos de explosivos".

"Las casas en algunas de las localidades han sido cargadas de bombas, lo que supone un riesgo adicional para los civiles a su regreso", ha dicho, pidiendo "más flexibilidad" para dar una respuesta humanitaria efectiva.

Por último, ha advertido de que "se espera que la escala de las necesidades humanitarias sigan creciendo según avanzan las líneas de frente hacia Mosul, especialmente una vez la zona urbana y periurbana sea más accesible".

El primer ministro de Irak, Haider al Abadi, anunció el 17 de octubre el inicio de la operación en Mosul. El grupo yihadista controla la ciudad desde verano de 2014 y la ha convertido en la capital iraquí de su proclamado califato.

Con cerca de dos millones de personas antes de que comenzaran los enfrentamientos, la ciudad constituye una zona de vital importancia para los milicianos en Irak. No obstante, el Gobierno teme que el asalto a la urbe provoque un éxodo masivo de civiles.