Sarkozy y Merkel pactan incluir multas automáticas contra los países endeudados

cuatro.com 05/12/2011 09:34

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, han acordado este lunes reformar los Tratados de la UE para incluir sanciones automáticas contra los países que superen los límites de déficit y deuda previstos en el Pacto de Estabilidad como receta para restablecer la confianza y poner fin a la crisis de deuda.

Sarkozy y Merkel presentarán sus propuestas para que se aprueben en la cumbre del 8 y 9 de diciembre y se ratifiquen lo antes posible. "El Consejo Europeo del jueves y viernes permitirá restablecer en parte la confianza y mostrar que cumplimos nuestros compromisos", ha explicado la canciller alemana al término de la reunión.

Los dos mandatarios han dicho que prefieren que la reforma se haga incluyendo a los 27 Estados miembros, pero han dejado claro que si algún país plantea problemas, los 17 países de la eurozona avanzarán en solitario. No obstante, el nuevo Tratado se mantendrá abierto para aquellos que quieran sumarse en el futuro.

"Queremos modificar los Tratados con los 27. Pero si hay alguien que no quiere o no puede hacerlo, en ese caso preferimos actuar a 17 (de la eurozona) porque el euro es esencial", ha insistido Merkel.

En la actualidad, los Tratados exigen una mayoría cualificada de votos de los Estados miembros para lanzar un procedimiento sancionador por déficit excesivo. Los dos mandatarios quieren modificarlos para que las multas se activen de forma automática a propuesta de la Comisión salvo si hay una mayoría cualificada de votos en contra.

Francia y Alemania han reiterado que todos los países de la eurozona deberán incluir una "regla de oro" en sus respectivas Constituciones para garantizar el equilibrio presupuestario, como ya ha hecho España. La reforma de los Tratados dará competencias al Tribunal de Justicia de Luxemburgo para revisar si estas reformas son suficientemente estrictas.

El presidente francés y la canciller alemana han reclamado además que se adelante a 2012, en lugar de 2013 como estaba inicialmente previsto, la entrada en funcionamiento del fondo de rescate permanente para países endeudados, que tendrá más flexibilidad para actuar porque no funciona únicamente con garantías sino también con capital desembolsado.

El caso de Grecia es único y los países de la eurozona devolverán sus deudas

Sarkozy y Merkel han resaltado además que el caso de Grecia es "particular" y único" y que en el futuro sólo se pedirá a la banca que asuma pérdidas sobre los bonos de la eurozona en casos excepcionales.

"No podemos comparar una gran economía como la economía italiana o la economía española, con lo que ha pasado en Grecia. Lo que queremos es decir a los ahorradores del mundo entero que en Europa la regla es que se reembolsan las deudas. Se reduce el déficit, se vuelve al crecimiento y se reembolsan las deudas", ha insistido Sarkozy.

En cuanto al papel del Banco Central Europeo, el presidente francés ha reiterado que los líderes europeos respetan su independencia y de que no le darán instrucciones ni en positivo ni en negativo.

Sarkozy ha cedido ante Merkel y se ha sumado a su rechazo a la emisión de eurobonos como receta para combatir la crisis. "Los eurobonos no son en ningún caso una solución a la crisis", ha dicho.

Merkel y Sarkozy han acordado además que los líderes de la eurozona se reúnan una vez al mes hasta que se resuelva la crisis de deuda.

Los dos mandatarios enviarán el miércoles sus propuestas al presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, para lograr que reciban el respaldo del resto de líderes europeos en la cumbre del 9 de diciembre.

"El objetivo es una unión fiscal que haga cumplir la disciplina fiscal en sus miembros y tenga los instrumentos necesarios para hacer frente a una crisis de forma eficaz", según ha destacado Merkel.

Ello significa incluir en los Tratados sanciones casi automáticas para los países que no respeten los límites de déficit y llevar a los incumplidores ante el Tribunal de Justicia de la UE, ha explicado la canciller alemana. Estos cambios se introducirán en una reforma de los Tratados, que podría llevar años, o más probablemente en un nuevo Tratado que cubra únicamente a los países que quieran sumarse, principalmente a los de la eurozona, y que podría activarse mucho más rápidamente.

Sin embargo, persisten todavía grandes diferencias entre París y Berlín sobre la forma de afrontar la crisis. Sarkozy defiende que la reforma de la UE debe dar más peso a los Gobiernos en detrimento de las instituciones comunitarias, mientras que Merkel aboga por dar más poderes a la Comisión. Ambos mandatarios coinciden, eso sí, que aunque se refuerce la supervisión de la UE sobre los presupuestos de los Estados miembros, la última palabra la seguirán teniendo los parlamentos nacionales.

En cuanto al papel de la autoridad monetaria, Sarkozy aseguró en su discurso de Toulon estar convencido de que "frente al riesgo de deflación que amenaza a Europa, el BCE actuará". "Corresponde al banco decidir cuando y con qué medios. Es su responsabilidad". "Pero nadie debe tener dudas de que asumirá su responsabilidad. De hecho, celebro que haya empezado a hacerlo", resaltó.

En contraste, Merkel insistió en su discurso ante Bundestag que el BCE tiene un mandato distinto al de la Reserva Federal o el Banco de Inglaterra y no puede embarcarse en un programa de compra masiva de deuda pública. Y volvió a rechazar la creación de eurobonos como receta frente a la crisis.

Nuevos compromisos de ajuste

Pero el refuerzo de la disciplina fiscal no incluye únicamente una reforma de las reglas de la UE sino también nuevos compromisos de ajuste de los países con problemas. El nuevo primer ministro italiano, Mario Monti, ha presentado, a petición de Bruselas, un nuevo plan de recortes cifrado en 24.000 millones de euros.

Y Merkel y Sarkozy presionarán al futuro presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, en la reunión del Partido Popular Europeo que se celebra el 8 de diciembre en Marsella, justo antes de la cumbre, para que anuncie cuanto antes su programa de ajustes. Merkel ya ha dicho que Rajoy tiene un "mandato claro" para realizar reformas rápidas, mientras que la Comisión Europea le ha pedido con carácter urgente una reforma laboral con el objetivo de reducir la "insostenible" tasa de paro de España.

El presidente del BCE, Mario Draghi, reclamó precisamente el pasado jueves a los Gobiernos europeos un nuevo "pacto fiscal" que incluya tanto las reglas de la UE para garantizar la disciplina presupuestaria como los compromisos de ajuste de los países amenazados.

Un pacto fiscal "es el elemento más importante para empezar a restaurar la credibilidad", dijo Draghi en una intervención ante el pleno de la Eurocámara. "Otros elementos pueden seguir, pero el orden es importante", ha señalado. Los expertos interpretan que, con estas palabras, el presidente del BCE ha sugerido un refuerzo del programa de compra de bonos si los líderes europeos aprueban este pacto en la cumbre de diciembre.

España defiende una reforma rápide de los Tratados y defiende los Eurobonos

El secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, ha pedido este lunes que si se hace una reforma de los Tratados para reforzar la disciplina fiscal, tal y como reclaman Francia y Alemania, ésta se lleve a cabo "lo más rápidamente posible".

España seguirá defendiendo en la cumbre del 8 y 9 de diciembre la creación de eurobonos para reducir los costes de financiación de los países con problemas pese a que el presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha capitulado ante Alemania y ha asegurado que no son la solución para la crisis, según el secretario de Estado para la UE.

"La reforma de los Tratados, si es necesario llegar a ella, habrá que hacerla lo más rápidamente posible, tendrá que ser una reforma que sea lo más acotada posible, en lo que sea imprescindible y lo más rápida posible", ha dicho López Garrido tras la reunión de los Veintisiete para preparar el Consejo Europeo.

"Lo que es siempre más eficaz, más creíble, tiene mejor impacto en nuestras economías son reformas que se hagan rápido, que se implementen lo antes posible", ha resaltado.

En cuanto a los eurobonos, el secretario de Estado para la UE ha sostenido que suponen "la consecuencia natural de una zona de moneda única y es la forma en que se aprovecha más esa zona monetaria logrando financiaciones mucho más baratas que las que se obtienen si va cada uno por su cuenta".

"Nosotros lo defendemos absolutamente, con toda claridad, porque nos parece que es un elemento fundamental de fortalecimiento de la zona euro", ha señalado. "Lo que han dicho Francia y Alemania es la posición de Francia y Alemania, otros países tenemos otra posición", ha insistido.