"Es un acto odioso y cobarde, que solo fortalece la resolución de Francia para luchar contra el terrorismo", ha hecho saber Fabius en un comunicado.
El ataque ha matado a cuatro personas, entre ellas dos malienses y un belga, en lo que parece un atentado terrorista contra intereses francófonos y en represalia por la operación francesa militar lanzada hace dos años en el norte del país contra los rebeldes tuareg.