"Le dije que no saliera hoy por las protestas, pero insistió en hacerlo", ha explicado la madre del chico, Caroline Okello, en declaraciones al diario keniano 'Daily Nation' publicadas en su edición digital. El chico recibió un disparo de arma de fuego.
Los simpatizantes de la oposición han salido este lunes a la calle convocados por Odinga a pesar de que las autoridades han prohibido las manifestaciones en las principales ciudades del país. En Nairobi, la Policía ha empleado gases lacrimógenos contra las manifestaciones.
Mientras, el presidente, Uhuru Kenyatta, ha aprovechado un mitin político para acusar a la oposición de intentar provocar el caos y forzar así un gobierno de coalición, extremo que niega Odinga.
Kenyatta y Odinga deberían enfrentarse en las urnas el 26 de octubre en una repetición de las elecciones presidenciales tras la anulación por el Tribunal Supremo de las elecciones del 8 de agosto que dieron la victoria a Kenyatta por irregularidades.
Sin embargo, Odinga ha anunciado su intención de no retirarse de la votación, lo que ha desatado una crisis política, aunque las autoridades han apuntado que la votación sigue adelante y que los ocho candidatos aprobados, incluido Odinga, estarán en las papeletas. En agosto solo Kenyatta y Odinga superaron el 1 por ciento de votos.
La oposición ha convocado manifestaciones para exigir una reforma de la ley electoral y una nueva convocatoria de elecciones. En las protestas tras la votación de agosto han muerto al menos 37 personas, la mayoría por acciones de la Policía.
El pasado viernes la Policía mató a dos personas más e hirió a una tercera cuando una turba intentó asaltar una comisaría en la ciudad de Bondo, en el condado de Siaya, en el suroeste del país, durante una manifesatción.