Una milicia de Misrata leal al gobierno de unidad arrebata a las tropas de Haftar la base aérea de Brak al Shati

EUROPA PRESS 19/05/2017 04:01

Según las informaciones recogidas por el diario local 'The Libya Herald', al menos 60 militares de las fuerzas de Haftar han muerto en el ataque, si bien otras fuentes elevan a 130 el número de víctimas mortales.

La ofensiva de la brigada, conocida como Brigada 201 --anteriormente Tercera Fuerza--, ha contado con el respaldo de unidades del Ministerio de Defensa del gobierno de unidad, al que ha sido integrada. La base se encuentra a 60 kilómetros al norte de la localidad de Sabha.

Las fuerzas de la 'Operación Dignidad' han asegurado que tenían información sobre el ataque y que se retiraron para tender una trampa y bombardear a los atacantes, si bien este extremo ha sido desmentido por fuentes de Misrata y Trípoli.

Las tropas de Haftar han acusado además de traición al gobierno de unidad, afirmando que se aprovechó de que gran parte de sus efectivos estaban en la localidad de Tocra, donde el martes se celebró el tercer aniversario del inicio de la 'Operación Dignidad'.

El Gobierno de unidad surgido tras un acuerdo mediado por Naciones Unidas se instaló recientemente a la capital para intentar unificar el país políticamente, aunque por el momento la situación sigue altamente fragmentada.

Haftar y el gobierno asentado en el este del país se han negado a reconocer la autoridad del gobierno de unidad, y el mariscal de campo ha tildado de "terroristas" a las tropas leales al mismo.

Sin embargo, la situación sufrió un cambio a principios de mes después de un encuentro entre Haftar y el primer ministro del gobierno de unidad, Fayez Serraj, en la que acordaron celebrar elecciones antes de marzo de 2018. El pacto no ha sido aún ratificado.

Por contra, Jalifa Gwell, líder del autoproclamado Gobierno de Salvación de Libia, instaurado tras su intento de golpe de Estado de octubre, rechazó el acuerdo y pidió un proceso interno para resolver la fragmentación que sufre el país, con tres gobiernos.

El intento de golpe estuvo encabezado por Gwell --quien ya fuera primer ministro de otro gobierno autoproclamado con sede en Trípoli--, quien ganó apoyos en las semanas posteriores gracias a los crecientes respaldos anunciados por diversas milicias que operan en el oeste del país y en la propia capital.