Las declaraciones del líder singapurense han tenido lugar después de haberse reunido en Washington con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
"Trump y yo hemos hablado, naturalmente, de la situación en la península de Corea", ha manifestado Lee durante una rueda de prensa en la Casa Blanca. "Nos oponemos fervientemente a la nuclearización de la región, lo que afecta a la paz y estabilidad de la zona", ha aseverado.
Lee ha hecho hincapié en la importancia de las medidas tomadas por Singapur frente a la amenaza de Pyongyang para aislar al Gobierno norcoreano.
"No existe una solución rápida y sencilla. Ejercer presión es necesario, pero también lo es el diálogo", ha aseverado Lee, que ha explicado que "Estados Unidos necesitará trabajar con otros países, incluidos China, Corea del Sur, Japón y Rusia, para resolver la situación".
Corea del Norte ha llevado a cabo en los últimos años numerosas pruebas nucleares y balísticas --la última de ellas un ensayo nuclear el 3 de septiembre-- que se han traducido en un endurecimiento del régimen de sanciones internacionales, lo que no ha servido para disuadir a Kim Jong Un.