McGurk, que ha estado acompañado por su 'número dos', el británico Rupert Jones, ha mantenido el encuentro con los comandantes de las FDS en la localidad de Ain Issa, a 50 kilómetros de Raqqa, según ha recogido la cadena de televisión iraquí Rudaw.
En declaraciones a la televisión Al Aan, McGurk ha dicho que ha viajado a Siria para tener una imagen de primera mano de la situación militar y humanitaria.
Posteriormente, se ha reunido con un consejo civil para discutir la etapa posterior a la expulsión de los yihadistas de la que es su 'capital' en el país árabe.
En este sentido, ha destacado la importancia "de que la gente de Raqqa esté al frente de sus asuntos" y "de que se creen las condiciones para que la gente vuelva a sus viviendas". "Eso es fundamental para la etapa posterior a Estado Islámico", ha recalcado.
McGurk ha asegurado que no se entrará en esta etapa durante un tiempo, apuntando a que las operaciones militares podrían durar aún un tiempo, añadiendo que hay "consultas cercanas" con Turquía sobre este asunto.
Así, ha subrayado que la batalla contra Estado Islámica será "larga", añadiendo que en la ciudad "hay muchos combatientes extranjeros radicales".
Las FDS, que comprenden unidades árabes y kurdas --entre ellas las Unidades de Protección Popular (YPG)--, anunciaron el 6 de noviembre el comienzo de las operaciones para la reconquista de Raqqa.
La coalición de milicias comenzó su asalto a Raqqa a principios de este mes tras hacerse con el control de las zonas adyacentes a la ciudad.
La ofensiva, llamada 'Éufrates Enfurecido', cuenta con la participación de la coalición internacional que encabeza Estados Unidos, encargada de dar cobertura aérea a las FDS.