"He sido víctima de una violencia institucional", ha comentado a la prensa a su llegada al aeropuerto de Bolonia, donde le ha recibido el ministro de Exteriores, Angelino Alfano.
"Lo que me ha ocurrido es ilegal", ha denunciado, lamentando que se prive de la libertad a un periodista "mientras está haciendo un trabajo en un país amigo". Del Grande, que ha llevado a cabo una huelga de hambre por su detención, ha asegurado que sigue sin entender por qué le detuvieron. El reportero ha aclarado que durante su detención no le han "tocado un pelo" y nadie le ha faltado el respeto.
A su llegada, se ha reunido con Alfano y también ha hablado por teléfono con el primer ministro, Paolo Gentiloni, según ha informado este último en su cuenta en Twitter, celebrando su regreso a Italia.
Alfano había anunciado la liberación en esta red social, precisando que había sido su homólogo turco, Mevlut Cavusoglu, quien le había traslado la noticia de que Del Grande iba a salir en libertad. "Estoy muy satisfecho del trabajo que han hecho todos y del hecho de que Gabriele vuelva a ser un hombre libre", ha declarado el ministro a Rai News 24.