La decisión del emir kuwaití implica que el primer ministro y el resto del Ejecutivo quedan en funciones hasta la formación de un nuevo Gobierno, según ha informado la agencia estatal kuwaití de noticias, KUNA. La Asamblea Nacional será notificada próximamente.
Jaber Mubarak Al Sabá, que también ejercía de ministro de Información, se sometió la semana pasada a una sesión de control en el Parlamento para que respondiera por las presuntas irregularidades presupuestarias del Gobierno y la falta de aplicación de algunas leyes.
Un grupo de diez diputados quedó insatisfecho con sus respuestas y amenazó con presentar una moción de censura. Al Sabá dijo entonces que continuaría en el cargo, pero el miércoles por la tarde los miembros del Gobierno le presentaron su renuncia.
El Parlamento tenía previsto celebrar dos sesiones esta semana --el martes y el miércoles--, para presentar y debatir la moción de censura, según ha recogido el diario local 'The Kuwait Times'.
La sede legislativa de Kuwait es una de las más antiguas de la región y con frecuencia suele provocar cambios bruscos de Gobierno. El actual Gabinete comenzó su trabajo el pasado mes de febrero.
En octubre de 2016, el emir kuwaití decretó la disolución del Parlamento por "motivos de seguridad" y "acontecimientos regionales", al tiempo que sugirió la posibilidad de elegir a nuevos diputados.
Kuwait es un importante aliado de Estados Unidos y goza de un sistema político relativamente abierto --según los estandares de la región--, cuya estabilidad ha dependido siempre de la cooperación entre el Gobierno y el Parlamento.