Los primeros enviados de la ONU --unos 700 en total-- han comenzado a llegar al país sudamericano, de cara a unas tareas de verificación que están pendientes de lo que los colombianos decidan el 2 de octubre en referéndum. Será entonces cuando digan si aceptan o no el acuerdo que firmarán el lunes el Gobierno y las FARC.
"Si ese acuerdo es negado por los colombianos, esa misión se cae", ha explicado De la Calle, que se ha referido a los protocolos acordados por el Consejo de Seguridad de la ONU. En este sentido, ha advertido durante un acto en Medellín de que no haría falta siquiera derogar la misión y "el cese definitivo ya no tendría verificación".
El jefe negociador ha subrayado que una tregua sin verificación es "insostenible" y ha recordado que el Gobierno puso precisamente esta vigilancia como condición para aceptar el alto el fuego con la guerrilla, según informa la emisora Caracol Radio.