Fiscalía dice que los acusados por los atentados contra iglesias confesaron tener lazos con Estado Islámico

EUROPA PRESS 24/05/2017 05:34

Según las informaciones recogidas por el diario local 'Al Masry al Youm', los acusados han dicho haber recibido armas y dinero de la rama del grupo yihadista en Libia y han añadido que se comunicaban por Telegram tras comprar tarjetas SIM protegidas.

En los atentados perpetrados el domingo de Ramos contra la Catedral de San Marcos de Alejandría y la Iglesia de San Jorge de Tanta murieron 47 personas. Un mes antes murieron 25 personas en un atentado contra la contra la Iglesia de San Pedro y San Pablo de El Cairo.

Los 48 sospechosos han sido acusados de pertenecer a Estado Islámico, que reivindicó los tres ataques.

El fiscal Nabil Sadek dijo el domingo que algunos de los procesados pertenecen a la dirección de Estado Islámico y que formaban parte de células constituidas en El Cairo en la región de Qena, en el sur de Egipto.

Los sospechosos están acusados de estos tres atentados y de un ataque contra un puesto de control militar en el desierto occidental de Egipto en el que murieron ocho policías y se cree que recibieron formación militar en Siria y Libia.

Cientos de policías, militares y milicianos han muerto en los últimos años de insurgencia islamista en Egipto, principalmente en la región del Sinaí, donde opera Península del Sinaí, conocido como Ansar Bait al Maqdis hasta que en 2014 juró lealtad a Estado Islámico y se convirtió en su filial en la región.

Ansar Bait al Maqdis inició sus operaciones en la península del Sinaí en 2011, tras el levantamiento popular contra Hosni Mubarak, e incrementó sus operaciones en 2013, después del derrocamiento del presidente islamista Mohamed Mursi en un golpe de Estado liderado por el actual presidente, Abdelfatá al Sisi.

Aunque las operaciones de los yihadistas se concentran en la región del Sinaí, en las últimas semanas se han incrementado las acciones contra las fuerzas de seguridad y la minoría cristiana en otros puntos del país.