En un comunicado, Tillerson ha informado de que "bajo la dirección del presidente (Donald Trump), el Departamento de Estado ha conseguido la liberación de Otto Warmbier", quien ha precisado que se encuentra ya "de camino hacia Estados Unidos, donde se reunirá con su familia".
Tillerson no ha ofrecido más detalles sobre las condiciones en las que se ha producido la liberación del estudiante universitario, limitándose a señalar que el Gobierno sigue discutiendo con las autoridades norcoreanas respecto a los otros tres ciudadanos estadounidenses detenidos por Pyongyang.
"Nuestro hijo vuelve a casa", ha confirmado al Washington Post su padre, Fred Warmbier. El joven de 22 años, estudiante de la Universidad de Virginia, está en coma y ha sido evacuado médicamente, han precisado sus padres al diario.
La familia ha informado de que los funcionarios norcoreanos les dijeron -a través de contactos con embajadores estadounidenses- que Warmbier cayó enfermo de botulismo (intoxicación producida por la ingestión de alimentos envasados que están en malas condiciones) un tiempo después de su juicio en marzo y cayó en coma después de tomar una píldora para dormir. Al parecer, ha permanecido en estado de coma desde entonces.
Está previsto que llegue este mismo martes a Cincinnati, tras pasar por la base estadounidense de Sapporo, en Japón. Warmbier, de viaje en Corea del Norte antes de ir a estudiar a Hong Kong, fue detenido la Nochevieja de 2015 en Pyongyang después de haber intentado presuntamente desplegar una enorme pancarta alabando al régimen de Kim Jong Un.
Fue entonces cuando le acusaron por "actos hostiles contra el estado", y después de un juicio de una hora de duración en marzo de 2016, fue condenado a 15 años de prisión con trabajos forzosos, informa Washington Post.
No lo habían visto en público desde entonces. Es más, a los diplomáticos suecos, que representan los intereses estadounidenses en Corea del Norte, se les negó el acceso. Más tarde, los representantes de Corea del Norte se pusieron en contacto con sus homólogos estadounidenses y les dijeron que el estudiante estaba en coma. Trump fue informado inmediatamente y ordenó la evacuación médica de Otto.
El joven llevaría en coma más de un año, desde poco después de su última aparición en público durante su juicio en Pyongyang en marzo de 2016.