"El proyecto de ley, en los términos en que ha sido aprobado, no sólo es radicalmente contrario al Derecho Internacional, sino incompatible con los baremos mínimos de respeto a los principios de derecho y de justicia que pueden esperarse", ha advertido el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación en un comunicado.
En este sentido, España considera que la nueva ley supondría un nuevo obstáculo, "especialmente grave", a la solución de dos estados. Además, "agravaría la tensión entre las comunidades", lo que no haría sino complicar las perspectivas de reanudación del diálogo entre el Gobierno de Benjamin Netanyahu y la Autoridad Palestina.
El Ejecutivo de Mariano Rajoy ha instado al Ejecutivo israelí a retirar este proyecto o, en su defecto, a que sea el Parlamento (Knesset) quien lo rechace en votación.