"El Presidente de la República celebra la liberación de nuestro compatriota, secuestrado el 1 de marzo en República Democrática del Congo", ha hecho saber el mandatario galo, Emmanuel Macron.
En el momento de su secuestro por un grupo de hombres armados, el ciudadano francés trabajaba en una mina de oro de Namoya junto a otros tres congoleses y un tanzano, cuyo estado se desconoce.
Si bien los secuestradores no han sido identificados, han estado en contacto permanente con las autoridades del país africano y con la operadora de la mina, Banro Corp, a quienes exigían un rescate de un millón de dólares y su compromiso para mejorar las infraestructuras de la región.
"Felicito a todos quienes han trabajado por su liberación, en particular, a las autoridades de la República Democrática del Congo por su movilización y por su eficacia", según la nota oficial.