El Ejército de Siria ha atacado la ciudad de Deraa, ubicada en el sur del país, para expulsar de allí a los combatientes del Ejército Libre Sirio, según han informado a Reuters residentes y activistas. La Asamblea General de la ONU podría este jueves aprobar una resolución "simbólica" para añadir presión sobre el Gobierno de Bashar al Assad.
"El bombardeo del Ejército ha comenzado al amanecer, después ha comenzado el intercambio de disparos", ha dicho Hussam Izzedine, miembro de la organización humanitaria Swasiah, que ha denunciado que los militares llevan preparándose para este asalto dos semanas.
Al parecer, se han escuchado explosiones y disparos en los distritos de Al Balad, Al Mahatta y Al Sad. Otro activista ha apuntado que el ataque está dirigido contra las zonas controladas por el Ejército Libre Sirio.
En respuesta a la ofensiva de los militares, los rebeldes han disparado contra las barricadas levantadas por el Ejército y contra los edificios que albergan a la Policía y las milicias pro gubernamentales.
Según uno de los activistas consultados por la agencia de noticias británica, dos miembros del Ejército Libre Sirio habrían resultado heridos.
Izzedine ha explicado que el Ejército Libre Sirio "ha proporcionado seguridad a los manifestantes que han vuelto a las calles". "Deraa está recuperando su papel en las protestas", ha advertido.
Deraa es la ciudad donde comenzaron las protestas populares contra el Gobierno de Bashar al Assad, en marzo de 2011. Si bien, la ofensiva lanzada por las fuerzas de seguridad apenas un mes después sofocó las manifestaciones.
El minsitro de Exteriores francés, Alain Juppé, anunció que la Asamblea General de la ONU podría votar este jueves una resolución "simbólica" para añadir presión sobre el Gobierno de Bashar al Assad. Por su parte, Rusia, insiste en que no permitirá que se utilice al Consejo de Seguridad de la ONU para "legitimar un cambio de régimen" en Siria.
Juppé ha informado de que se estaba "renegociando" una resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU "a fin de persuadir a los rusos". Sin embargo, el ministro de Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, se mantiene en que las peticiones de cambio de régimen en Siria suponen un "camino directo" que incrementaría el número de fallecidos en el país, según ha informado la agencia de noticias rusa RIA Novosti.