EEUU pide a RDC que permita "sin retraso" que la investigadora de HRW retome su trabajo en el país

EUROPA PRESS 11/08/2016 04:53

En su rueda de prensa diaria, la portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Elizabeth Trudeau, ha asegurado que la "salida forzada" de esta investigadora, junto a la expulsión de miembros del Grupo de Investigación de Congo y de Global Witness a comienzos de este año son prácticas "incompatibles" con los esfuerzos para apoyar una mayor transparencia, rendición de cuentas y democracia en el país.

"Pedimos a los congoleños y al Gobierno que permitan a la investigadora de HRW que retome su importante trabajo en el país sin retraso", ha indicado Trudeau, antes de continuar: "También pedimos a todos los actores congoleños, tanto Gobierno como oposición, que respeten las normas y eviten la violencia".

Sin entrar en detalles, la portavoz del departamento de Estado ha señalado que Estados Unidos mantiene "conversaciones regulares" con el Gobierno, si bien ha indicado que en ellas se promueve la "rendición de cuentas, transparencia y la democracia".

Este martes, las autoridades de RDC se negaron a renovar el visado de la investigadora tras una serie de expulsiones de otros investigadores extranjeros en un año electoral con muchas tensiones.

Sawyer lleva trabajando en el país desde 2008 y ha representado una de las voces más críticas contra la persecución de la disidencia antes de las elecciones programadas para noviembre, pero que el Gobierno ha asegurado que no se podrán celebrar por cuestiones logísticas y presupuestarias.

El director ejecutivo de HRW, Kenneth Roth, ha calificado el incidente de un "descarado intento de amordazar a los que investigan la represión brutal del Gobierno contra aquellos que apoyan los límites del mandato presidencial"

En abril, las autoridades ya expulsaron del país a Jason Stearns, director del Grupo de Investigación para RDC de la Universidad de Nueva York, poco después de haber publicado un informe en el que relacionaba a soldados con la muerte de civiles.

Dos activistas de Global Witness que investigaban la explotación forestal también fueron obligados a abandonar el país el mes pasado, acusados de incitar a una comunidad local a revelarse.