"Realmente espero (tener una mejor relación con Estados Unidos) porque este hombre es amable", ha indicado, en una entrevista concedida a la cadena CNN Philippines. "Como se dice en lenguaje coloquial, es alguien con quien es fácil llevarse", ha indicado.
"Yo le digo (a Trump): 'Tú sabes que tenemos la misma boca, señor presidente; la única diferencia es que la tuya está en inglés y la mía en mi dialecto (tagalo), pero la misma al fin y al cabo", ha continuado.
La relación entre Manila y Washington ha empeorado desde la llegada al poder de Duterte, que en numerosas ocasiones ha arremetido contra Obama --al que en una ocasión llegó a llamar 'hijo de puta'--, y entre sus propuestas se ha comprometido a reducir al máximo posible la cooperación militar y, por tanto, la presencia militar estadounidense en suelo filipino.
Esta es una de las cuestiones con las que tendrá que lidiar el próximo inquilino de la Casa Blanca en materia de política exterior. "¿Por qué no les voy a echar (a los estadounidenses)? Me quieren destruir. ¿No sería estúpido un presidente que permitiera esto?", ha continuado.
Duterte ha acusado a Estados Unidos de actuar únicamente en su propio beneficio y de acosar a China, y ha señalado que si Washington quiere "recuperar todo el mar de China Meridional", que "vaya y empiece". "Vayan y envíen todos sus barcos, y luchen y todo", ha arremetido el filipino.
El mandatario, que ha asegurado que la construcción de islas artificiales en esta zona no suponen una grave preocupación y que si así fuera, Estados Unidos debería encargarse de poner fin a ese problema, ha indicado que no ve urgente tratar con las autoridades de Pekín el fallo dictado en julio por el Tribunal Permanente de Arbitraje de La Haya que invalidó la mayoría de las reclamaciones de China en el canal y ha afirmado que ya lo abordará en su momento.