"He puesto en libertad a catorce reos de la cárcel de Bilibid", ha aseverado el dirigente en alusión a la mayor prisión del país. La decisión ha sido tomada después de que Duterte se reuniera en Malacañang con Benito y Wilma Tiamzon, líderes de la guerrilla maoísta del Nuevo Ejército del Pueblo (NPA, por sus siglas en inglés), brazo armado del Partido Comunista de Filipinas (CPP).
Desde que accedió a la Presidencia de Filipinas, Duterte ha intentado llegar a un acuerdo con la guerrilla maoísta, que se encuentra representada por el FDN en el marco de las negociaciones.
A principios de abril, ambas partes llegaron a un nuevo acuerdo de alto el fuego interino de cara a la cuarta ronda de las conversaciones, según ha informado la cadena de televisión filipina ABS-CBN.
El presidente de Filipinas ha insistido en que su papel al frente del país es el de establecer la paz. "No puedo ser un presidente en tiempos de guerra", ha aseverado en relación con los continuos ataques por parte de los milicianos contra el Ejército filipino.