España defiende el fin del "círculo vicioso de violencia" en Siria

NOTICIAS CUATRO/AGENCIAS 09/01/2014 09:18

Así lo ha manifestado en el Parador de la Arruzafa en Córdoba, durante la inauguración de la reunión de consulta de la oposición siria, a la que posteriormente acude el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación del Gobierno de España, José Manuel García-Margallo, con la presencia de una docena de grupos, amén de personalidades individuales, integrantes de la oposición moderada al régimen de Bashar al Assad en Siria, con el objetivo de que salgan "resultados", de cara a la conferencia Ginebra II, prevista para el próximo 22 de enero en Suiza.

En este sentido, Gómez-Acebo ha descrito la situación en el país donde "las legítimas aspiraciones de los ciudadanos sirios se han visto reprimidas por una violencia brutal" y ante ello muestra la preocupación por "la peligrosa deriva de los últimos meses", dado que este conflicto se ha cobrado ya más de 130.000 vidas, 2,3 millones de personas obligadas a abandonar el país y más de seis millones de personas que han dejado sus hogares.

Según ha detallado, la situación en el interior es "cada vez más compleja" con "la presencia creciente de combatientes extranjeros, que nada tiene que ver con los principios que inspiraron la revolución". Ante ello, defiende que el Gobierno de España y restantes países de la Unión Europea (UE) han propugnado desde el principio del conflicto "la necesidad de una transición política en Siria", puesto que "el régimen actual perdió su legitimidad cuando respondió con represión a su pueblo".

Entretanto, ha recordado que España "vivió hace años su propia transición política, que fue posible gracias a la cohesión de las fuerzas políticas que lograron dejar de lado sus diferencias para agruparse en plataformas conjuntas". Así, subraya que "solo mediante la coordinación de actores e individuos que desean desempeñar un papel positivo en la transición puede avanzarse a un sistema estable".

Con este objetivo, según agrega, se acoge en España "con mucha satisfacción" la iniciativa de ayudar a organizar esta reunión en Córdoba, previa al encuentro en Suiza, que espera que "sea el primer paso hacia la paz en Siria", de manera que "haga posible" el cese de la violencia y un gobierno de "transición".

Y aunque en el encuentro haya grupos de distintas partes, "todos están movidos por contribuir a la construcción de un nuevo sistema político en Siria", y con ello "un sistema democrático que sea inclusivo y responda a las necesidades de distintos grupos étnicos y religiosos y garantice la igualdad de ciudadanos".

"EL ESPÍRITU DE DIÁLOGO"

Por todo ello, confía en "el espíritu de diálogo" y el encuentro sea "fructífero y con conclusiones útiles", además de que la conferencia de Suiza abra Siria que "sea capaz de superar el trauma en el que esta sumida desde hace tres años".

Al respecto, ha comentado que Córdoba es "una gran ciudad de gran significado histórico y cultural para Siria y España y es símbolo de la amistad que une a los pueblos", a lo que agrega que "esa amistad tan antigua y profunda entre ambos pueblos es la que nos hace compartir el sufrimiento y preocupación por lo que ocurre en su país desde hace casi tres años".