El sospechoso, identificado solo como A. B., ha sido arrestado en la provincia de Bursa, en el noroeste del país, tras ser identificado en una grabación de una cámara de seguridad, ha informado la agencia de noticias oficial Anatolia, que cita fuentes policiales. El individuo será ahora trasladado a Estambul para ser interrogado.
Barakat, de 60 años, y su hija, de 22 fueron halladas muertas en su vivienda del barrio de Uskudar de Estambul, en el lado asiático de la ciudad. Los cuerpos fueron descubiertos después de que los compañeros de la hija, Hala Barakat, informaran a la Policía de que llevaba dos días sin aparecer en su trabajo.
Una hermana de Barakat, Shaza, denunció a través de Facebook que estas muertes son obra de la "mano de la injusticia y la tiranía", en referencia al régimen del presidente sirio, Bashar al Assad.
Barakat trabajaba como activista de Derechos Humanos desde la década de 1980, cuando el país estaba gobernado por Hafez al Assad, padre del actual mandatario sirio.