Así lo publica The Times, que indica que una investigación sobre el incidente que afectó a 75.000 pasajeros señala que el fallo se debió a un error humano más que a un problema en el sistema de British Airways.
British Airways ha sido acusada de ignorar las advertencias sobre el trabajo de subcontratación, la reducción de costos y la pérdida de personal experto y experimentado y, desde marzo de 2016, ha despedido a 600 trabajadores, publica The Times.