"No queda mucho de la antigua Becky": El terrible declive de la paciente más joven con demencia hereditaria

Noticias Cuatro 04/09/2017 12:19

Becky Barletta, de Hundon en Suffolk, un condado al este de Inglaterra, necesita atención las veinticuatro horas del día tras ser diagnosticada con demencia frontotemporal hereditaria –síndrome clínico causado por la degeneración del lóbulo frontal- y ha tenido que mudarse a casa de sus padres. Vive con su marido y sus dos hijos junto a la casa de sus padres para poder estar atendida durante todo el día.

La joven, instructora de esquí de profesión, fue diagnosticada de la enfermedad por el mismo médico que diagnosticó a su tío James, que falleció a los 50 años de edad como consecuencia de la demencia. Pero no es el único familiar de Becky que ha padecido esta enfermedad. La prima de su padre, Philipa, murió a los 40 años por la demencia frontotemporal.

Los médicos aseguran que Barletta, con 32 años, se ha convertido en el “caso más joven” y los facultativos le han dado una esperanza de vida de 10 años: “Dicen que cuanto más joven es el paciente, más rápido son los efectos. En ella ha sido rapidísimo”, cuenta Sophie, su hermana, a Daily Mail.

Los síntomas de Becky se hicieron patentes meses antes de contraer matrimonio con su novio. Sus amigos notaron un “comportamiento inadecuado”, pero se negaba asistir al médico, hasta que su hermana la convenció pata que se realizara las pruebas.

Desde que sufre esta enfermedad, la británica ha cambiado radicalmente su personalidad y la familia de la joven narra como "no queda mucho de la antigua Becky" .

La familia recauda fondos para ayudar a la investigación de esta enfermedad de la que “actualmente no hay cura ni tratamiento para ralentizar o parar la demencia”. “Necesitamos cambiar esto tan pronto como sea posible”, asegura su hermana, quien cuenta que “desafortunadamente esto no podrá ayudar a Becky”.