Airbus ha asegurado hoy que está cooperando con las autoridades estadounidenses tras una revisión de sus procedimientos sobre el cumplimiento reglamentario en EE.UU., en la que el propio consorcio ha informado sobre "determinadas inexactitudes" en las comunicaciones efectuadas al Departamento de Estado de Estados Unidos.
El consorcio está obligado, conforme a la parte 130 del reglamento estadounidense sobre el tráfico internacional de armas ITAR (US International Traffic in Arms Regulations, por sus siglas en inglés), a realizar determinadas comunicaciones.
"Airbus no puede ofrecer una estimación razonable del tiempo que puede ser necesario para resolver este asunto ni de la cuantía o la gama de potenciales indemnizaciones, penalizaciones u otras acciones gubernamentales, en su caso, en las que se incurra en relación con este asunto", ha afirmado en un comunicado.
En cuanto a las investigaciones iniciadas por las autoridades británicas y francesas, en los procedimientos abiertos por la Serious Fraud Office (SFO) británica y el Parquet National Financier (PNF) francés, el consorcio europeo ha señalado que continúa cooperando plenamente con ambas, incluso en relación con los posibles asuntos que podrían afectar al negocio de Airbus.
"Las investigaciones de la SFO y el PNF y toda penalización potencialmente impuesta como consecuencia de las mismas podrán tener repercusiones negativas para Airbus", ha reconocido el grupo aeronáutico.
El grupo ha indicado que la potencial imposición de penalizaciones monetarias y la cuantía de las mismas o cualquier otra sanción proveniente de estas investigaciones en el ámbito europeo "dependerán de las conclusiones objetivas y jurídicas definitivas de la investigación y podrían tener un efecto sustancial en los estados financieros, las actividades empresariales y las operaciones de Airbus". "Por el momento es demasiado pronto para determinar la probabilidad o el alcance de cualquier consecuencia", ha concluido.