El gobierno provincial ha detallado que las fuerzas de seguridad han localizado y desactivado dos proyectiles de mortero que habían sido colocados dentro de la mezquita.
En su comunicado, recogido por la agencia afgana de noticias Jaama Press, ha indicado que, de haber estallado, habrían causado "un número masivo de víctimas" entre los fieles.
Las autoridades no han apuntado por el momento qué grupo estaría detrás del intento de atentado.
El anuncio ha llegado dos días después de que las fuerzas de seguridad se incautaran dos caballos cargados con 50 kilogramos de explosivos durante una operación en la localidad de Durbaba, situada en esta misma provincia.
Las autoridades han abierto una investigación para intentar determinar cuál podría ser el objetivo contra el que se pretendía atentar, así como el grupo detrás del plan.
En la provincia operan los talibán y el grupo yihadista Estado Islámico, que cuenta con varios de sus principales bastiones del país en Nangarhar, lo que ha provocado que las fuerzas de seguridad hayan llevado a cabo numerosas operaciones en los últimos meses.