"La longeva política de Estados Unidos de acogida de refugiados había creado una situación en la que todos ganaban: primero, ha salvado las vidas de algunas de las personas más vulnerables en el mundo, quienes a su vez enriquecían y fortalecían las nuevas sociedades a las que llegaban. La contribución de los refugiados y los migrantes a sus nuevos hogares en todo el mundo ha sido extraordinariamente positiva", según el comunicado.
"ACNUR y la OIM matienen su esperanza de que Estados Unidos continúe con su importante papel de liderazgo y larga tradición de proteger a las personas que huyen de conflictos y la persecución", según la nota, y "mantienen su compromiso de trabajar con la Administración de Estados Unidos hacia la meta que compartimos para preservar los programas de reasentamiento y de inmigración"
"Creemos firmemente que los refugiados deben recibir el mismo tratamiento para la protección y asistencia, y las oportunidades para el reasentamiento, independientemente de su religión, nacionalidad o raza", según el texto.
"Vamos a seguir participando activa y constructivamente con el Gobierno de Estados Unidos, como lo hemos hecho durante décadas, para proteger a los que más lo necesitan, y para ofrecer nuestro apoyo en materia de asilo y migración", concluye el comunicado.