Por primera vez en cinco décadas del conflicto colombiano, que ha dejado más de 260.000 muertes y siete millones de desplazados como consecuencia de la violencia, la paz está más cerca que nunca en Colombia, aunque aún hay 4,9 millones de colombianos con necesidades humanitarias, según ACH.
"Hay lugares donde no se han erradicado todas las formas de violencia y donde sigue habiendo grupos armados que siguen afectando a la población", ha destacado el director de ACH en Colombia, José Luis Barreiro.
El trabajo humanitario en Colombia busca fortalecer las capacidades y la integridad de la población, sobre todo en los lugares a los que el Estado no tiene acceso. Para ello, ACH cuenta con la ayuda de las propias comunidades para crear comités de gestión, algo que mejora las relaciones entre las instituciones gubernamentales y las propias comunidades.
"Esto pone en evidencia la importancia de poner en marcha toda la capacidad humanitaria para que el acuerdo de paz sea una realidad", ha añadido Barreiro.