La apertura de un camino facilitará la búsqueda en la zona del siniestro del A320

Noticias Cuatro/Agencias 30/03/2015 14:30

El teniente coronel Xavier Vialenc, portavoz de la Gendarmería, ha explicado a Reuters que el camino, accesible para vehículos todoterreno, estará completado el martes o el miércoles tras limpiar el acceso de vegetación y estabilizar el terreno. "Vamos a ganar tiempo", ha subrayado.

Hasta ahora, la quincena de investigadores que trabajan en el lugar ascienden y descienden mediante helicópteros que parten del aeródromo de Seyne-les-Alpes, a unos diez kilómetros de distancia. Su trabajo depende de las condiciones meteorológicas, a menudo cambiantes en la montaña, y las piezas más importantes del avión son difíciles de helitransportar.

Los investigadores ya han conseguido aislar 78 ADN distintos que deberán ser cotejados con los de las familias de las víctimas para su identificación, ha recordado Vialenc, precisando que unas 350 personas trabajan sobre el terreno en esta investigación.

La segunda caja negra, que registra los parámetros de vuelo, no ha sido encontrada aún, casi una semana después del siniestro, ha recordado el portavoz.

Por el momento, la investigación ha determinado que el copiloto del avión, identificado como Andreas Lubitz, habría estrellado voluntariamente el avión contra los Alpes con las 150 personas, incluido él, que iban a bordo.

Viaje de familiares

Siete familiares de víctimas españoles han viajado acompañados por el equipo de asistencia especial de Lufthansa a Marsella, donde se encuentra el principal centro de atención a los allegados de los pasajeros del vuelo 4U 9525.

En este centro de apoyo a familiares, los equipos del Grupo Lufthansa colaboran estrechamente con las autoridades francesas para prestar apoyo a las familias y amigos de las víctimas, ha comunicado Germanwings.

A fecha de hoy, 325 personas han sido acogidas en Marsella, en su mayoría alemanes y españoles, antes de trasladarse hasta Seyne-les-Alpes, en las proximidades del lugar del siniestro. "Esta acogida durará tanto como sea necesario, sin límite de tiempo", ha asegurado Walter.

En el centro se encuentran 90 personas, en su mayoría asalariados de Lufthansa, de las que 58 se dedican al servicio a las familias. El resto se ocupan de la intendencia que ha sido confiada a la sociedad estadounidense Kenyon, especializada en la logística de crisis.

El responsable de Germanwings ha confirmado el pago de una "ayuda financiera rápida" de 50.000 euros a cada familia de las víctimas. "Es una ayuda adquirid que no supone una deducción de otras indemnizaciones", ha añadido.