Estas fuentes, que han informado a la agencia Anatolia en condición de anonimato debido a las restricciones sobre los medios en Turquía, ha asegurado que la Policía ha llevado a cabo una operación en la que han detenido a 31 abogados en Ankara, 16 de los cuales se encuentran bajo custodia policial.
Según estas fuentes, los esfuerzos continúan para detener a otros nueve abogados vinculados con el movimiento de Gulen.
Los sospechosos han sido acusados de "intentar subvertir el orden constitucional mediante la fuerza y la violencia, y ser miembros de la organización de Gulén".
Turquía considera al movimiento de Gulen como una organización terrorista a la que acusa de estar detrás del golpe de Estado fallido del pasado 15 julio. La asonada se saldó con 230 muertos y cerca de 2.200 heridos.