"Es una irresponsabilidad lo realizado por el consorcio Grupo Unidos por el Canal", ha dicho en el marco de una entrega de ordenadores en Curundú.
Además, el jefe de Estado ha instado a "apoyar la decisión que tome el Canal de Panamá". "Cerremos filas", ha pedido, en declaraciones recogidas por el diario 'La Estrella'.
Este miércoles ha expirado el plazo para que el GUPC y la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) llegaran a un acuerdo con el fin de solucionar los sobrecostes generados en la construcción del tercer juego de exclusas, unos 1.600 millones de dólares.
El administrador del Canal de Panamá, Jorge Quijano, ha denunciado la suspensión de las obras y ha advertido de que, aunque está abierto al diálogo, los trabajos concluirán en la fecha prevista, 2015, "con o sin el grupo Unidos por el Canal".
Pese a las declaraciones de Martinelli y de Quijano, el presidente de Sacyr, Manuel Manrique, ha asegurado que la eventual paralización de las obras depende de la respuesta que la autoridad gestora ofrezca a una última propuesta de acuerdo. "No hay fecha en concreto, pero depende de la respuesta del Canal", declaró en declaraciones a la Cadena Ser, recogidas por Europa Press.
PASTOR, LLAMADA A LA RESPONSABILIDAD
En España, la ministra de Fomento hace una llamada desesperada a la responsabilidad de las partes y el titular de Economía ya estudia cómo minimizar el impacto financiero de la falta de acuerdo.
La obra ejecutada en un 70 por ciento, presenta unos sobre-costes de 1.200 millones de euros. El compromiso era que estuvieran finalizadas en junio de 2015. Ahora, 10.000 puestos de trabajo están en juego y la cotización en bolsa de Sacyr sufría ayer un severo retroceso.