Un grupo de estudiantes se ha encerrado en el decanato de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Autónoma de Barcelona "contra la represión y la criminalización del movimiento estudiantil". También han ocupado dependencias en las facultades de Geografía y Derecho.
Mientras, un centenar de estudiantes contrario al plan de Bolonia de reforma universitaria han bloqueado el acceso al rectorado de la Universidad de Alicante, en solidaridad con sus compañeros catalanes. Los universitarios han impedido el paso al rector, vicerrectores y funcionarios, con quienes se han encarado.
"Si Bolonia va adelante, los estudiantes vamos hacia atrás", rezan las pancartas de los estudiantes alicantinos. Y en Zaragoza una veintena de estudiantes de la Asamblea en Contra de la Privatización de la Universidad (ACPU) han ocupado el Rectorado del campus de la Plaza San Francisco de la Universidad de Zaragoza.
Los alumnos, que llevan más de cien días encerrados en el edificio Interfacultades para protestar contra la reforma educativa de Bolonia, se han instalado en el Rectorado con varias colchonetas y pancartas, para mostrar su solidaridad con los estudiantes de la Universidad de Barcelona detenidos la semana pasada.
Tensión en Barcelona
El rector de la Universidad de Barcelona, Dídac Ramírez, ha dicho que no pedirá otro desalojo de las nuevas facultades ocupadas por estudiantes siempre que éstos permitan el desarrollo de la actividad normal en las aulas, pero que recurrirá a las fuerzas del orden si se desatiende esta petición.
Ramírez ha afirmado que su voluntad es no llamar de manera "automática" ni "mecánica" a la Policía para resolver las nuevas ocupaciones de facultades de la UB, que han tenido lugar en las últimas horas.
Al mismo tiempo, el rector ha pedido a los estudiantes encerrados en las facultades de Historia y Filosofía y en Derecho que "reflexionen" y que no impidan, como ha ocurrido en algún momento de la jornada en el campus del Raval, que los estudiantes que quieran puedan asistir a clase.
En esta línea, se ha mostrado esperanzado en que la ocupación sea "puntual" y que no sea necesario recurrir a la fuerza, tras asegurar que tomar la decisión del desalojo de la semana pasada le causó "mucho dolor".
El rector, que ha afirmado que su principal obligación es garantizar "los derechos" de toda la comunidad universitaria, ha dicho que la UB mantendrá siempre abiertos los canales del diálogo con el movimiento 'antiBolonia'.