Los socialistas pretenden ser un tú a tú con los ciudadanos para reconquistar a los miles de votantes perdidos. Así que el que ha querido se ha acercado, le ha podido dar documentos con sus proyectos, reclamaciones o propuestas, o directamente hablar un minuto. Y, poco a poco, el secretario general, Pedro Sánchez, ha ido contestando: “No voy contra ningún partido, pero yo respeto a los votantes y pido respeto a los votantes del PSOE. No pretendemos aprovecharnos de la frustración de la ciudadanía. No nos van a ganar las ganas de cambiar las cosas”. Cambiar la política, cambiar el modelo de crecimiento económico. “Creo que la quiebra de confianza es que la buena gente que ha cumplido con el sistema ahora mismo no se garantiza y eso es el reto de la política”. De momento, para recuperar esa confianza, lo que han transformado es el modelo de mitin clásico, el del monólogo, con unas asambleas con las que Pedro Sánchez quiere recorrerse todas las provincias españolas.